OTRA HISTORIA DE PERDON
Pilar Rodríguez siempre recordará aquella noche del 21 de enero de 1992, en la que su hija, Marta Obregón, fue asesinada por un delincuente cuando regresaba a su casa, después de haber estudiado durante toda la tarde en el club Arlanza, un centro de mujeres del Opus Dei.
“Perdonar –aconseja San Josemaría en el punto 805 de Surco-. ¡Perdonar con toda el alma y sin resquicio de rencor!
Actitud siempre grande y fecunda. —Ese fue el gesto de Cristo al ser enclavado en la cruz: “Padre, perdónales, porque no saben lo que hacen”, y de ahí vino tu salvación y la mía”.
Muchos cristianos se esfuerzan por imitar en sus vidas la actitud misericordiosa de Jesús; una actitud que, en ocasiones, exige un esfuerzo inmenso, heroico tantas veces, y que es una fuente de paz y de unión con Cristo.
FUENTE: www.opusdei.org, testimonio
1 comentario:
Yo pienso a menudo en esta gente que perdona ante una agravio tan grande. ¡Es fácil hablar de perdón! Pocos los que lo hacen a la hor de la verdad. Necesitamos estos testimonios.
Un abrazo
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