Benedicto XVI a los jóvenes: «Tenéis la tarea de mostrar al mundo que la fe trae una felicidad y alegría verdadera, plena y duradera. Y si el modo de vivir de los cristianos parece a veces cansado y aburrido, entonces sed vosotros los primeros en dar testimonio del rostro alegre y feliz de la fe»

martes, septiembre 13, 2011

Por primera vez vi un PELICANO


Comparado con otro tipo de animales como el águila o el león, que infunden poderío, bravura o soberanía, el pelícano puede parecer hasta ridículo. Pero la comparación con Jesucristo que hicieron los primeros cristianos, no se basaba en esos primeros aspectos, si no en la belleza y la nobleza de su corazón.

Los egipcios decían que este animal simboliza la compasión, pues en los 120 días que dura la incubación, no se aleja del nido más que lo imprescindible. Cuando sus crías nacen, los pelícanos, al igual que todos los animales, tienen que buscar comida para alimentarles. El rasgo más interesante que se encuentra fuera de lo común, es que si el pelícano adulto no encuentra comida para sus crías, en vez de abandonarlas (como hace la gran mayoría de los animales) les da de comer de su propia carne. El gran ave se abre el pecho con su pico para alimentar con su sangre y se arranca trozos de su propio cuerpo para dárselos a sus crías.

Es decir, sacrifica su vida para que sus hijos puedan vivir. He ahí la gran similitud con con Cristo que ofreció su cuerpo y su sangre para la salvación del hombre. Por este motivo el pelícano se utilizó como símbolo cristiano, símbolo de piedad y sacrificio, resaltando la más alta expresión del amor humano y divino. Cristo que ofreció su cuerpo y su sangre para la salvación del hombre.

La Iglesia confiesa esta fe con las palabras de santo Tomás de Aquino, implorando:
«Pie Pellicane, Iesu Domine,
me immundum munda
tuo sanguine, cuius una stilla
salvum facere totum mundum
quit ab omni scelere».
«Señor Jesús, bondadoso pelicano, límpiame a mí, inmundo, con tu sangre, de la que una sola gota puede liberar de todos los crímenes al mundo entero».